La frase que uso por título no me corresponde, su autor..... Johan Cruyff.
Barcelona lo hizo... Liga, Copa del Rey y Champions forman un trío de trofeos envidiable para cualquier club del mundo, ningún equipo español lo había logrado antes. La doctrina futbolística inculcada en los jóvenes formados en La Masía ha dado los frutos naturales de un proyecto a largo plazo ejecutado por dirigentes que saben lo que quieren para su club. En realidad, hace mucho tiempo viene dando resultados.
El partido para mi no tuvo el brillo futbolístico que podía esperarse y no por el F.C. Barcelona, que dió clase de fútbol, sino porque Manchester United sólo tuvo a C. Ronaldo enchufado en la final mientras Rooney estuvo perdido y no fué suficiente el amor propio de Tévez en el segundo tiempo.
Alguien siempre toma la iniciativa y fueron los ingleses, con tres intentos del portugués que inquietaron al Barcelona, los que parecían decididos a todo. Hasta que aparece Eto'o, pase de Iniesta (uno de los pequeños a los que alude la frase), enganche de Samuel hacia adentro y de punta, sí! el puntazo es un recurso técnico a veces (se acuerdan de Romario?), marcó el primero. Van Der Sar solo la manoteó... apenas 10 minutos.
El resto del primer tiempo se vió un Barcelona ubicado y concentrado. Con momentos de buen toque, rotación y control de la pelota principalmente en los pies de Iniesta y Xavi (otro pequeño). Las proyecciones de Sylvinho y Puyol y en líneas generales un equipo impecable, no le dejó mucho a Manchester a excepción de un tiro libre de O'Shea y otro intento de Ronaldo... al descanso con el 1-0.
El segundo tiempo me gustó más, Puyol puso su sello en el partido con mucha confianza en la proyección. Paradójicamente, el defensa sufrió las faltas del delantero al que tenía que controlar por su banda. Ronaldo trató de evitar las descolgadas del español y terminó ofuscado al verse superado. Al final, el saludo de ambos es otra muestra de profesionalismo del primer mundo del fútbol.
Un "penal" contra Messi que no fué, un tiro libre al palo de Xavi y el toque de pelota de ese mediocampo catalán serían el preámbulo del segundo, alrededor de los 25 minutos. Su autor? el diferente, el tercero de los pequeños a los que se refiere Cruyff, el que una vez más te sorprende haciendo algo inesperado... Lionel Messi.
La tomó Puyol cerca del área y mete un pase a Eto'o, rechazo de la zaga y la vuelve a tomar Barcelona con Xavi. Dentro del área el genial argentino ya sabe lo que su compañero va a hacer y se perfila. La mayoría de las veces Messi sorprende con gambetas y quiebres que resuelve en algún rincón del arco con esa zurda privilegiada. Otras veces son remates potentes y precisos.
Esta vez usó la cabeza.... literalmente.
La técnica del cabezazo fue notable, el cuerpo lo tiró hacia atrás para que el balón le llegue a donde tenía que ser y con un ligero giro del cuello la puso allá... al palo izquierdo del arquero.
Era poco lo que Manchester podía hacer después del gol de Messi, sólo Ronaldo en otra muestra de su temperamento ganador, estuvo a punto de descontar ahí nomás pero Valdéz se lo impidió.
Los catalanes terminaron el partido tocando y rotando la pelota con clase y categoría de Campeón. Mientras en la hinchada inglesa los rostros de desolación lo decían todo, los seguidores azulgranas mostraban su felicidad por la Triple Corona.
Saludos.
